El sindrome del atracón consiste en un impulso irrefrenable por comer, ingeriendo una gran cantidad de comida en poco tiempo, generalmente menos de dos horas.Tras ello, la persona afectada siente culpa y desánimo aunque, a diferencia de la bulímia, no realiza estrategias compensatorias inadecuadas, como la incitación al vómito, los laxantes o el ejercicio exagerado. Otra diferencia con la bulimia es que ésta suele presentarse sobre todo en mujeres, mientras el atracón puede hacerlo en ambos sexos.
El trastorno por atracón puede estar presente hasta en el 50% de los grandes obesos. Aunque la obesidad no es, en sí misma, un trastorno de la conducta alimentaria, ciertos trastornos como el atracón si que pueden ser causa de dicha obesidad en algunos casos.
Para establecer que una persona sufre este trastorno, se atiende, entre otros criterios, a la frecuencioa de los episodios, que deben repetirse al menos dos días a la semana, durante un mínimo de seis meses. Como todos los trastornos alimentarios, el sindrome del atracón tiene un caracter psiquiátrico.
En cuanto a sus causa, se debe a una predisposición genética asociada a factores psicológicos, ambientales o sociales.
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